miércoles, marzo 24, 2010

Alergia

No habrá medalla púrpura para un guerrero cobarde como yo.
No habrán canciones de despedida para un fugitivo de pies furiosos.
No habrá respeto si sigo en la vorágine de polvo de desierto.
Entonces despierto y digo soy un hombre nuevo,
que puede olvidar lo que sin ingenio no logró descifrar.
Es la suerte un látigo de azote fuerte,
y el azar un escritor muy vendido
(corrompido también por -la buena vida-)

Hay/Hoy un jolgorio de lágrimas débiles y escuálidas rasguñando mis mejillas
sacando de ellas la película dócil que tus besos habían dejado
/ o que tu recuerdo o mi imaginación habían inventado /
Pero he decidido tomar la palabra de mi dulce mentira,
y hacerla verdad como flor en el mar,
como pan en almuerzo.
Pero he decidido mirar mucho más allá
¿he decidido ya?
...tengo en mente mirar hasta allá,
bien lejos, no muy distante, bien lejos
hasta lo infinito de una noche...
¿Qué tierra?
¿Qué arena?
¿Qué roca?
Sobre el cielo construiré mi arca,
y llevaré conmigo mis sentimientos de dos en dos.
¡Espera! construiré dos arcas,
una para los hijos del amor,
y otro para los sentimientos de cuna de odio.
Y de dos en dos los subiré,
y haré encallar al azar una de mis arcas...
a ver quién gana según la maldita suerte.
Cara o sello, si es amor -vida-
si es oprobio -muerte-

Después de cuatro meses

Está tu silueta sobre el verde césped
y mira hacia arriba el otoño que viene bien silencioso,
paseándose por el verano como perro rabioso.

/esperando su turno,
el momento de tocar su canción.
¡Verano vete,
esta no es tu estación!/

Animalito ¡este es mi turno!

Llevas puesto
-un ¿vestido?-
que se ciñe excelente al cuerpo
unas calzas que bien te calzan
y una mirada que desearía ya un tuerto.

No me cansas.

Eres un santuario,
te dije por tu cabello, el arrumaco
tu cuerpecito sobre el mío y tu vestuario.

Un santuario protector,
de mi étnia muerta
de mi lengua muerta,
que revive de apoco con tus besos,
de mi corazón muerto*

¡qué hablo
ya dije -eres mi puerto-!

Hoy te quiero
mañana mantenme vivo.


/*un corazón muerto es aquel que carece de esperanzas/

martes, marzo 23, 2010

black and white


Blanco y Negro.
Blancas avenidas,
negros tus senderos.
Acaricio con las manos oxidadas por flecha de Apolo,
tus cabellos morenos.
Bien puestitos en tu cabeza,
bellos suaves cual seda.
Rostro blanco muerto en las tablas.
Nuca negra rodando sobre la mesa.
Mientras aún mis manos te consuelan,
recostándose tu aroma sobre mis dedos.

Blanco y negro, quiero verte:
exhuberante naturaleza,
selva verde.
Como en mis sueños me imagino montado en botes
sobre tu cuerpo de amazonas,
en esta "realidad" no puedo hacer más que añorar tu espalda.
Naciente y blanca,
es tu armada y amada espalda
que atraviesa mis deseos con un ejército de espadas.
Henchidas tus montañas,
planos, a veces, tus cerros.
Mis manos de ficción las escalan
gozando cada trecho,
como un caballo de olfato surcando
los campos de afrecho.

Y yo negro sauce marchito,
lloro sombra a tus espaldas,
en el mismo metro cuadrado
pero a la vez tan lejos.
Y por instantes siento que desvanesco
y bien me agarro de tu cuerpo.
Aprovecho el pánico
y negro pánico manoseo tu blanco invierno.



/del año de la cocoa
distante como Chuchunco
pero estuvo ahí como un cisne
blanco y negro en un lago de juncos/

REALMENTE VIEJO. SIN FECHA






sábado, marzo 20, 2010

sin título


Aún quedan colores
en tus pinceles de cadáver
para pintar un mundo de olores vivos
sobre las marchitas rosas lilas.

Óleos y acuarelas
de tu pincel sin vida,
pintan por las noches sobre la desnudez de mis telas,
provocando al mundo cuestionador de mis romances.

(algo me tempera.
Tu atmósfera me presiona hacia una nueva era)

Deditos de joven rebelde,
pintan sobre la seca África
aquellos campos de cereales:
de trigo y avena.

Alimento de esperanza,
a mis pasados de la buenanueva,
porque hay quienes mueren como tú,
a falta de algo.
Y se extinguen de a poco,
o se consumen como drogas.
No hay momento que perder,
salvemos a quienes caen hasta que llegue nuestra hora.

Violeta y naranjo,
para pintar arcoiris sobre nuestros rostros,
comparten generosas las auroras boreales.

-Pequeñísimos espasmos eléctricos
expulsan sobre mis manos los ángeles abisales-

Amarillo iluso,
pinto con el oro que no tengo tu boceto.
El sol se puso
sobre la Europa que extrañabas.

Me mojan verdes manzanas:
de exquisitas licenciosas,
regando de jugo mi suelo latino.
Y de blanco pinto sobre mi cara la tuya:
perfecta.
-Abstracto me resulta todo-
y todo lo acompaño de tu canto.

Sol de Atacama,
Naranjo desierto de luz de alicanto.
Sol patagón,
iluso sueña de los paisajes nuestra protección.

En mi muralla cuelgan tus pecas
y la piel porcelana blanca
suave cual pluma de ganso.
Así pegadito a mi tacto
miro y miro y no me canso.
Es que los colores de tus penas
dibujan mi vida,
y tus llantos, a veces,
escriben mis actos.

Octubre, 2009

(Y al principio de todo una foto de esa fecha, con una de las personas más importantes de toda mi vida. Quizás alguna estrofa es para ella, quizás no, pero muchas de mis sonrisas le pertenecen)

viernes, marzo 19, 2010

¿Inseguro?

"soy un hombre nuevo"
grité victorioso junto al verde y el rosa,
en los mesones de maderas
en los contenedores de tenedores y lozas.
Vestí entonces un traje de rayas fieras,
-salvaje era animal de sabana y
reo de masmorra-

Pero olvidé despojarme de mi antigua ropa,
quedando ésta bajo el ímpetu generoso de los retazos de valiente.
(Poco se consigue amparados en el alero de lo que no es):

Sigo caminando inocente como un tierno niño de ojos bellacos,
por callecitas de partes descuartizadas
donde el pavimento y los baches se arrumban en un saco,
con mis pies de lechón altruista.

Difícil es
retratar nuestras facciones y encerrarlas en un marco
¡Oh, que difícil hacerlas pasar bajo un puente!
junto al torrente
como cuadro ahogado en un caudal
donde los tintes se destiñen en su agüita cristalina
¡Qué difícil ser otros y olvidar!

viernes, marzo 12, 2010

Autitos chocadores


Volvería a ser un niño
para jugar a los autitos chocadores
andar sin rumbo ni camino
sin medir consecuencias
ni dando explicaciones

Chócame en el vuelo
soy pez besador alado y desprevenido
con un topón en los labios
rojos blancos inocentes cual niños

Rojos

Mira mis ojos que guiñan los tuyos
cual foco de auto al virar

¿A quién has de mirar?
¿a la mancha de tu blusa?
Mira mis contornos
mis molduras
yo soy pelusa en la solapa
arruga sin planchar de polera
el grado que se cierne en cualquier cómoda hombrera.

Tómame suavecito (soy pelusa) en tus dedos
y dispara con cariño un soplido
¡sóplame bien bien lejos!
¡a volar con mi cuerpo de niño!
donde ni con catalejo
alguien pueda ver ni escuchar el Do de mis gritos.


22 de Agosto de 2008

jueves, marzo 11, 2010

Pío Pío



Estábamos sobre el blanco tolva invierno
el sol y sus luces sintiendo el piar.
Gritaba gritaba por comida
y nadie la oía.


Estaba a la orilla
de maderas corontas y rejillas
una mano adulta daba sobre la suya agua
el maíz recogido en la última cosecha.

Piaban, ellos, y ella los alimentaba.


Piaba ella. ¿Quién la escuchaba?

(Pío pío; hipócritas,
pío pío; desvalidos...
Personaje de mojiganga
plumajes picos patas

agudo pico tan dueño del pío pío
más impío)

lunes, marzo 08, 2010

No más

No pude soportar
palabras de alas marchitas;
colibríes verbales de vuelo muerto
y heridas de calibre hipérbole.

A mi alféizar aún le ataca el viento
que arrastra inocuo tu recuerdo
(guardo aún las huellas de tus dedos de ave
y las maderas se hunden con el recuerdo de tu tarso Eva).

Prometo no hablar más de este amor,
aunque en mi retina aún esté tu figura,
tu plumaje, en mis labios tu sabor,
tus fragancias en mi nariz y en mi tacto tu ropaje.

Espero con sinceridad,
anhelo, no ser lo que algún día zapateó en tu cabeza.
Y si es así en mi azotea la atmósfera pesa,
sabiendo que no supe explicarme a la mujer que quise.

Farewell

no recordaré tu aire. Recordaré tu fuego,
fogata que cobija;
incendio que destruye.

quise tanto hacerte sentir vendaval
cuando otros quisieron convencerte de ser aire viciado.

But now,
maybe,
you're going to your Cloud.



miércoles, marzo 03, 2010

Tramadora

No es justo que siempre salgas ilesa
¿a cuántos diste muerte?
mi bella princesa.
Asfixiada, mueres bajo las fibras que te entrelazan
las mismas que capturan concomitantes la piel sobrante.
Arranca de mis manos que podrían aprehenderte
los dedos empeñosos son jaula en tu cuello.
Círculo estrangulante, de mis manos con presión,
círculo moribundo de barrotes de prisión.
Que mueran tus huérfanos

Ulises desde el sepulcro tirará tus pies:
maldita hembra filosa
de falso tejer

(tan artístico)


¿Qué trama
en la cama sobre su manto onírico?

¿Qué trama
mi dama al mirar mis piernas y entremedio de ellas?

Un vaso de mi sangre derramada con gloria
pensaste en poner sobre tu boca.
¡No cantes victoria!
no volverás a alimentar a tus bastardos,
más que con maleza hierba seca y espinas de cardos.
La suciedad en tus extremos,
la limpieza en tu vientre,
lo extranjero como nunca
sobre tus sedas se hace presente.
Despídete rápido,
que la luz se apaga, despídete
del mundo que devorabas.
Ahora gritas con miedo
como mustia el adiós muerto
dejando sobre las mesas
los hilos el hilván
la rueca el telar
el guión que escribías cuando fuiste envuelta.
Deja ahí tu huella, tu legado
con esta madera el destino se ha ligado:
{ éste aquí no es tuyo canta tu epitafio
éste aquí es mío: himno danza sobre mis manos }

He ahí tu cadáver de piel marchita tiesa
cadáver antílope
de vanidoso león hambriento.

Vete tranquila mi linda Penélope


Enero 2010

martes, marzo 02, 2010

Puerto

Como siempre el que busca en otros lo que le pertenece
pierde lo que en él jamás encontró...
Y yo lo tengo todo,
¿no es verdad señor?
yo lo tengo todo
¿si o no mi amor?

Tengo los besos azul pacífico

del universo marítimo que se me presenta
Tengo la piel teñida de un color específico:
la mujer que amaina cualquier tormenta
y tengo los botes para navegar en el infinito
¡atento!, tengo los botes anclados en mi puerto favorito.

Tengo aquellos pescadores
pescando para mí
.
Tengo la carnada sabrosa
que tanta dicha ha traído para mí
(y para ti tanta desdicha)

Un cardumen de felicidad
por el mar corriendo está con prisa.
¡Yo no soy cazador buscando alimento
ni pescador buscando otro puerto!
Yo conozco desde mi proa
hasta mi popa
(digo que) hasta el anclaje muerto
conozco todo sin verlo alguna vez en espejo
tan sólo necesito ver mi propio destello.

Tengo diáfana ave
dominical sus colores
que al surcar con su boquita las sales
blanco y azul
ruedan sus besos sobre mi cuello
Tengo mi ave que inventó alas
para regalarlas a mis brazos mortales
(gracias a tu sacrificio
iré por peces
SOLO PARA CONTENTARTE)